martes, 25 de abril de 2017

Alianza con el enemigo


Es bien sabido que uno de los mejores aliados para la fotografía de bosques es la ausencia de viento. Un día de “calma total” nos proporciona la posibilidad de centrarnos en nuestros paisajes boscosos con la garantía de que las hojas no se moverán y que la definición de la escena será máxima.

Lo habitual es encontrarse con momento de viento y calma alternados, con lo que solemos templarnos en los primeros a la espera de los momentos de calma para realizar nuestras capturas. Ese es el juego con el que nos toca lidiar.

Pero hay días en que esa alternancia no existe, tan solo se presentan diversos niveles de intensidad de viento, días en los que tenemos dos opciones: Retirarnos o aliarnos con el enemigo.

Este es el caso de la imagen que encabeza este post. Diafragma cerrado, velocidad lenta y esperar el resultado con el movimiento de las ramas.

Ripollés (Girona)

Nikon D2x, AF-S Nikkor 70-200mm VR ED, polarizador, trípode, Raw, Iso 100.

martes, 18 de abril de 2017

Aguadas


 No era el día con la mejor luz, pues el sol era el de una radiante mañana de primavera, ni la disposición de las flores permitía contrastes cromáticos sugerentes, pero esa sesión yo llevaba una idea en la cabeza: Jugar con el enfoque selectivo e intentar conseguir una atmósfera que emulase las aguadas de una acuarela.

Tras varias pruebas jugando con el ensayo error, esta imagen se aproxima bastante a la idea que llevaba en mente. Trabajando con un diafragma bastante abierto, f4, se seleccionó como elemento enfocado a la amapola situada en el extremo superior derecho de la imagen, moviéndome a su alrededor en la medida que los elementos circundantes los permitían, intenté componer una imagen en la que las amapolas situadas en primer plano y fuera de foco recordasen a las aguadas antes mencionadas.

Vallés Oriental (Barcelona)

Nikon D2x, AFS - Nikkor 70-200mm f2.8m VR ED, polarizador, Raw, ISO 100, a pulso.

viernes, 7 de abril de 2017

Orgánico



Como si se tratase de una suerte de disección, “Orgánico” se me antoja una imagen con reminiscencias a estructuras orgánicas, tal vez vistas a través de una disección en algún animal.

La realidad es bien diferente, pues se trata de la superficie del agua estancada en unas salinas situadas cerca de la localidad de Riba de Santiuste (Guadalajara) en la que celebramos el pasado enero la reunión anual del colectivo Portfolio Natural.

La superficie del agua estaba colonizada por unas estructuras con textura filamentosa que posiblemente se debían a la proliferación de unas colonias bacterianas o tal vez a unas algas rodófitas en superficie. El caso es que el contraste de estas con el fondo recubierto de sal a escasos centímetros de la superficie y el contrapunto de las dos pequeñas piedras que vemos en el extremo inferior izquierdo de la imagen componía una impresión que dista mucho de la realidad.

Nikon D2x, AF-S Nikkor 70-200mm f2.8 VR ED, polarizador, trípode, Raw, ISO 100.